Anoche hubo una redada Snailbusters en la terraza. Los caracoles se estaban comiendo las plantas de aquel que vosotros sabeis. Armado de linterna, no tuvo piedad con ellos. Aunque si humanidad (o caracolidad en este caso). Ahí están en una maceta y tapados con un plato, porque estos se escapan al mínimo descuido. Están esperando su traslado al parquecillo del Passeig de Sant Joan. ¡Qué se coman las plantas del ayuntamiento! Pero igual allí no duran más que un teledario. Hay un restaurante en la plaza Verdaguer en el que cada año hacen "La Festa del Cargol" por estas fechas y se ponen ciegos comiéndoselos. Qué asco...
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